Como podeis ver la niebla nos acompañó y nos impidió ver a la cabra hispánica, eje central de nuestra excursión, pero no por ello dejó de tener encanto el paisaje del que pudimos disfrutar.
Así que con la moral muy alta y buen ambiente nos dispusimos a utilizar las cámaras con lo que se pusiera a tiro.
No era fácil llegar al sitio donde se suponía que teníamos posibilidades de encontrar a esos animales.
Había que descansar después de la caminata y eso fue lo que hicimos.
Tomamos un pequeño tentenpié. 
Seguimos intentándolo pero la niebla estaba ahí, no nos dió respiro.
A pesar de todo seguimos paseando por el lugar buscando la foto deseada.
A falta de cabras, algunos hicimos la idem.
A pesar de la citada niebla, el paisaje del lugar es espectacular y tenía un encanto especial.
No era fácil llegar al sitio donde se suponía que teníamos posibilidades de encontrar a esos animales.
Había que descansar después de la caminata y eso fue lo que hicimos.
Tomamos un pequeño tentenpié. 
Seguimos intentándolo pero la niebla estaba ahí, no nos dió respiro.
A pesar de todo seguimos paseando por el lugar buscando la foto deseada.
A falta de cabras, algunos hicimos la idem.
A pesar de la citada niebla, el paisaje del lugar es espectacular y tenía un encanto especial.
A la hora de volver el tiempo estaba igual que a nuestra llegada, pero el buen ambiente y las risas nos acompañaron todo el camino. Amenazamos con volver el año que viene y si puede ser antes, pues mucho mejor.
